Bueno, en un acto sensible, la Cámara de Diputados pidió a Inmujeres cancelar la campaña por considerarla irrespetuosa y en contra los derechos de las mujeres.
El jueves pasado, la Cámara pidió a la presidenta del Inmujeres, Patricia Espinosa que retire inmediatamente la campaña que está al aire desde el 7 de marzo. Al mismo tiempo que se solicitó su sustitución por otra que promueva el respeto a los derechos humanos desde una perspectiva integral que no cause morbo ni risa de la sociedad.
Del texto de la diputada Angélica de la Peña:
"la campaña promovida por el Inmujeres difunde un mensaje confuso e incongruente al señalar que la mujer no es un objeto y al mismo tiempo la representa con un objeto pornográfico.
La campaña es imprecisa al señalar que el acoso sexual debe ser denunciado si tomamos en cuenta que el delito de acoso sexual no está tipificado en el Código Penal Federal, únicamente se encuentra establecido el delito de hostigamiento sexual"
De la Peña argumentó que lejos de contribuir a erradicar la violencia, los anuncios denigran a las mujeres y reproducen la violencia. La petición se basó en la Ley Federal para Prevenir y Sancionar la Discriminación, que en su artículo 9 prohíbe la transmisión de mensajes e imágenes que ofendan y ridiculicen a las víctimas de violencia.
Aunque Inmujeres no está obligado a escuchar la petición de los diputados sí debe darse por enterada en una comunicación oficial a la Mesa Directiva de San Lázaro. ¿Entenderá Patricia Espinosa o su dirección de Comunicación Social lo que se les está pidiendo? Uno esperaría que sí, pero es muy triste que las mismas personas que se supone están designadas para promover un cambio tan importante en la cultura sean tan obtusas que no entienden cómo transmitir el mensaje correcto.
¿Realmente creerá Patricia Espinosa lo que promueve?
En Vecindad Gráfica hay un artículo sobre esta campaña desde el punto de vista de diseño y comunicación por Adán Avelar,
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