jueves, octubre 21, 2004

¿Bloggear o no bloggear?

Es cierto que los blogs están diseñados para ser bitácoras. Esto es, para llevar un registro cronológico sobre una serie de eventos. Después de revisar varios blogs registrados en Blogs México y otros sitios relacionados me dí cuenta de que aunque hay una gran cantidad de bitácoras catalogadas como de "Opinión" o "Personales", gran cantidad de estas solo reflejan noticias de otros sitios, e incluso hay notas duplicadas en diferentes blogs sin cambiar un ápice de la redacción.

Estoy de acuerdo en que hay muchas notas que son dignas de ser divulgadas, pero también creo que por eso se les publica en sitios de noticias. Los blogs deberían cumplir con una función más editorial que promocional. El sabor del blog viene de los comentarios de su redactor. Otra característica que he notado en la blogósfera es la notada polaridad de los autores: o se tienen opiniones demasiado extremistas sobre algún asunto y como buenos trolls deforman, mutilan o tergiversan notas y citas ajenas con tal de generar polémica y que el comentario se ajuste a sus creencias particulares. El otro extremo es donde el autor se deslinda de toda responsabilidad y escribe en un tono frío y neutral intentando ser "políticamente correcto".

¿Bloggear o no bloggear? Ese es el dilema. Llevar un blog -o en el caso de algunas personas que llevan dos o más- es una labor que requiere mucho trabajo y dedicación. Muchas veces al estar en una situación en la que no se dispone de tiempo, o en un momento de bloqueo de escritor es muy tentador recurrir a la solución fácil (copy+paste). En otros casos es más sencillo escribir sin comprometerse y en los peores se recurre a la falsificación de información o a publicar chismes sin fundamentos o referencias.

Creo que la solución es muy sencilla: hay que ser honestos a la hora de escribir, sin buscar halagar ni complacer a nadie, excepto a uno mismo. Afrontémoslo: llevado a su última consecuencia, un blog personal es un monumento al ego. Lo menos que podemos hacer entonces es ser honestos sobre nosotros mismos para en consecuencia ser honestos con nuestros lectores.

Y si no se tiene nada que decir, entonces es mejor no decir nada.

A lo largo de la semana pasada no pude darme el tiempo de publicar mi usual nota diaria debido a falta de tiempo, de sueño y a un par de emergencias familiares. En estos días me pondré al corriente con publicaciones fuera de orden cronológico -también como parte de un experimiento, dado que no creo en la linealidad del tiempo- para reponer la continuidad del Book of Fate.

Nos seguimos leyendo, y a los que leen esto muchas gracias por su paciencia.

2 comentarios:

Mytho dijo...

Esa es una de las razones por las que no escribo nada en ciertas ocasiones, y de hecho, la última nota que publique es del 14 de octubre,,, creo que sí se necesita un poco de disciplina para mantener un blog, pero es que realmente, cuando no tengo nada que decir, generalmente no lo digo XD

Saludos, Herr Mauricio

Mauricio Angulo S. dijo...

Como bien dicen: "En boca cerrada crecen dientes sanos y fuertes". Y sobre todo a la hora de escribir, es más importante la calidad que la cantidad, aunque sería muy agradable leerle más seguido, Herr Romero.